Los familiares de los tripulantes del barco “fantasma” prosiguen la búsqueda

Esencia 21

La policía forense sigue sin encontrar pistas sobre el paradero de los tres desaparecidos de catamarán KAZ-II. Lo único sobre lo que han hecho referencia, es que el barco tenia desplegados sus defensas de goma, algo que se utiliza para atracar el barco o cuando otra embarcación se va a pegar a ella.

Ante las primeras hipótesis de la policía, como que fueran golpeados por una ola ante un presunto mal tiempo, algunos familiares han manifestado que no están de acuerdo con estas teorías. Hope Himing, sobrina del capitán del KAZ-II, ha declarado a los medios de comunicación que teorías como esta no se sustentan, pues si había mal tiempo, como es que los aparejos de pesca estaban siendo utilizados, o porque no se pusieron los chalecos salvavidas ante una tormenta.

“Mi madre y yo somos muy espirituales. MI madre ha tenido en estos días una sensación muy fuerte de que Des (Derek) se encuentra en perdido en algún lado y ambas tenemos la sensación de que no ha muerto. Ahora nos centramos en intentar conseguir que se reanuden las labores de búsqueda”. Tantos estos como otros familiares de los desaparecidos han manifestado su disconformidad con la cancelación de las labores de búsqueda por parte de la policía. Afirman que cancelar la búsqueda tan solo tres días después de iniciadas no es justificable. Todos los familiares y conocidos afirman que los tripulantes eran marineros experimentados y muy cautelosos, por lo que la esperanza de vida en condiciones desfavorables podría ser mayor.

Donna, la hija de Meter Tunstead, uno de los desaparecidos, expreso a los diarios “no sabemos lo que ha sucedido, pero de una cosa estoy segura, mi padre hará todo lo posible para volver a casa y reunirse con mama y conmigo. Nosotras no podemos rendirnos”.

Con la búsqueda oficial suspendida, los esfuerzos se centran ahora en las búsquedas privadas. Por el momento, tres embarcaciones han rastreado las islas cercanas al área de la desaparición con la esperanza de que los marineros hubieran podido llegar a nado desde allí.

La policía sigue calificando el caso como un misterio. “Podemos urdir miles de teorías en cuanto a que puedo haber sucedido, pero lo cierto es que nuestras investigaciones se centran en las pistas que tenemos que son prácticamente nulas. No hay nada que indique un ataque al navío, un secuestro o cualquier otra clase de crimen”, expresó Warren Webber, policía de Townsville.