Por: B. R. Sotelino
Una ponente asegura que los muertos suelen comunicarse a través de aparatos eléctricos. El congreso sobre fenómenos paranormales se desarrolla en el Centro Social Caixanova
Psicólogos, parapsicólogos, sociólogos, físicos, ingenieros, químicos, ex diplomáticos y hasta técnicos en electrónica, son algunas de las credenciales de los ponentes que participan en el segundo Congreso sobre Investigación de la Supervivencia a la Muerte Física con Especial Mención a la Transcomunicación Instrumental (TCI), que se celebra desde ayer en el Centro Social Caixanova de Vigo.
El termino TCI incluye el fenómeno de las voces electrónicas (psicofonías) junto con las llamadas comunicaciones de los espíritus a través de otros medios electrónicos. Los que se toman a broma los contactos con el más allá (porque ya les parece bastante complicado entenderse con los del más acá), no tienen nada que hacer en este encuentro internacional, en el que se analizan y exponen temas como The ghost project (el proyecto fantasma), Investigación científica de evidencias sobre la vida después de la muerte o Comparación entre voces psicofónicas, telefónicas y directas presuntamente paranormales.
La ex cónsul de Portugal en Vigo, Anabela Cardoso, es una de las organizadoras de este seminario, que comenzó con una ponencia de la socióloga norteamericana Sylvia Hart. La especialista confesó al auditorio que era una escéptica hasta que falleció su marido hace 23 años y empezaron a ocurrir cosas extrañas en su casa, con bombillas que se encendían y se apagaban a su libre albedrío y grabadoras que sólo funcionaban si se introducía la música favorita del finado. Con el tiempo, Hart se ha convertido en una especialista en la materia y en una recopiladora de historias ajenas que centra su campo de investigación en los fenómenos de perturbaciones eléctricas ocurridos a continuación de la muerte de seres queridos. De hecho, afirma que un 80% de las personas que han sufrido una pérdida cercana (pareja, hijos... ), experimentan su presencia tras la muerte, y lo hacen «jugando» con los aparatos eléctricos para manifestarse, independientemente de que estén enchufados a la red o no. «Los muertos se sirven de objetos cotidianos para comunicarse con los vivos, sobre todo a través de luces, sonidos y movimientos», dice.
Según la socióloga norteamericana, los viudos y viudas tienen propensión, durante un tiempo tras el fallecimiento reciente de su cónyuge, a percibir su presencia telepática, despiertos o en sueños, y sentir que les tocan. La luz es es el recurso más habitual de los espíritus para comunicarse con los vivos, seguida por la televisión, la radio, relojes, teléfonos, contestadores automáticos y en último lugar, los ordenadores. La especialista no tiene constancia de contactos desde el más allá a través de mensajes SMS, o al menos, no hizo mención alguna a ningún caso parecido. De su ponencia se deduce que a los espíritus les gusta la red eléctrica y que no se llevan bien con las últimas tecnologías.
Al final de su exposición, Sylvia Hart ofreció la explicación más racional de estos extraños sucesos, comentando que «suponer que están aquí nos confiere una sensación de alivio ante el dolor que sentimos ante la pérdida». El congreso continúa hasta mañana en Vigo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario